La cavitación es un tratamiento no invasivo utilizado en el campo de la estética para reducir la grasa localizada y mejorar la apariencia de la piel.
La cavitación es un proceso que emplea ultrasonidos de baja frecuencia para crear burbujas microscópicas en el líquido intersticial de los tejidos adiposos. Estas burbujas implosionan, rompiendo las membranas de las células adiposas (adipocitos). Los ácidos grasos que se liberan son posteriormente metabolizados y eliminados por el cuerpo a través del sistema linfático y urinario.

INDICACIONES

1. Reducir grasa localizada.
2. Mejorar la apariencia de la celulitis.
3. Contornear y esculpir el cuerpo.
4. Mejorar la textura y firmeza de la piel.

CONTRAINDICACIONES

1. Mujeres embarazadas o en período de lactancia.
2. Personas con marcapasos u otros dispositivos electrónicos implantados.
3. Pacientes con enfermedades hepáticas o renales.
4. Personas con infecciones o inflamaciones en la zona a tratar.
5. Individuos con problemas de coagulación sanguínea.

DETALLES
Procedimiento: Estético. Es importante que este procedimiento sea aplicado por un profesional cualificado con el fin de: 1) garantizar la seguridad y eficacia del tratamiento; 2) determinar si es adecuado para el paciente; 3) personalizarlo a las necesidades y resultados deseados por el paciente; y 4) evaluar la condición de salud preexistente y cualquier otro riesgo potencial.
Invasivo/Ablativo. No.
Tiempo de recuperación. Sin tiempo de recuperación, permitiendo retomar las actividades cotidianas de inmediato.
Anestesia. No.
Duración. Los efectos de la cavitación pueden ser visibles después de la primera sesión, pero el resultado final se observa generalmente después de varias semanas, a medida que el cuerpo elimina la grasa destruida. Los resultados pueden ser duraderos si se mantiene un estilo de vida saludable, aunque pueden ser necesarios tratamientos de mantenimiento.
Número recomendado de sesiones. El número de sesiones necesarias varía según el paciente y el área a tratar. Generalmente, se recomiendan entre 6 y 12 sesiones, espaciadas entre 7 a 10 días.
Tiempo de cada sesión (aprox). Entre 30 y 60 minutos dependiendo del área tratada.

Cuidados posteriores.

1. Hidratación. Mantener una hidratación adecuada.
2. Alimentación. Evitar el consumo de alcohol y comidas grasas, y seguir una dieta equilibrada.
3. Actividad física. Realizar actividad física moderada para ayudar a eliminar la grasa movilizada.
4. Calor. Evitar exponer la zona tratada a fuentes de calor intenso (como saunas) durante 48 horas.

Aparatología: XXX.